Hoy he decidido que me gustaría hacer más cosas a parte de los cupcakes, que aunque son bastante bonitos, ya empiezan a aburrir. Así que he optado por crear un pastel de calabacín, bacon y queso. Espero que os guste la receta y la hagáis.
Ingredientes:
1/2 Calabacín
3 huevos
2 cs de queso fresco batido 0, 0% mg
1 cs de aceite de oliva
6 cs de salvado de avena (en su defecto de trigo sarraceno)
1 cs de maizena
1 sobre de levadura (medio sobre de levadura del mercadona. Siempre tamizada, si no, se endurece y aparece en grumos)
40 gr. de queso rallado (yo uso el Edam semicurado)
50 gr. de bacon (una tarrina de bacon en tiras)
Sal al gusto
Preparación:
Precalentar el horno a 200ºC
Picar o rallar el calabacín (yo lo piqué).
Rallar o picar el queso.
Freir el bacon y cuando esté dorado dejarlo reposar en una servilleta de papel para que empape y no deje mucho aceite en la masa.
Separar las claras de las yemas. Montar las claras a punto de nieve.
En el bowl con las yemas añadir el calabacín, las cuatro cucharadas de queso batido, el queso rallado (dejar un poco para poner en la parte superior del pastel) y el aceite mezclándolo bien. Una vez hecho esto, añadimos la levadura y el salvado. (Aquí si usamos la levadura del Mercadona y no la Royal, mejor con un colador, mezclar el salvado con la levadura porque si no, ésta se endurece y se queda hecha grumos por toda la masa haciendo que ésta sepa a bicarbonato). Mezclar todos los ingredientes bien, añadir el bacon (dejar un poco para adornar la parte superior del pastel) y poner sal al gusto.
Añadir las claras montadas poco a poco para que se oxigene la masa y pasar al molde ya untado con mantequilla para que no se pegue la masa al cocerse.
Metemos la masa al horno ya precalentado y lo dejamos a 200ºC durante 25-30 minutos. Pinchamos con un palillo para ver si está bien cocido.
Desmoldamos y ¡a comer!
Resultado
Un pastel para 2 personas ó un pastel que podemos congelar y descongelar sin ningún problema.
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